-Once maneras de
sentirse solo, de Richard Yates.
-Nuestro iglú en el
Ártico, de Mario Levrero.
-El cuaderno gris,
de Josep Pla.
-Nuevos poemas,
de Rainer María Rilke.
-La edad de hierro,
de J. M. Coetzee.
-Pura lógica, de
Benjamín Prado.
-Técnicas de
iluminación, de Eloy Tizón.
-Libro del
desasosiego, de Fernando Pessoa.
-El insólito
peregrinaje de Harold Fry, de Rachel Joyce.
-Dublinesca, de
Enrique Vila-Matas.
-Bestiario, de
Julio Cortázar.
-Dublineses, de
James Joyce.
-El sueño eterno,
de Raymond Chandler.
-Diarios, de
John Cheever.
-Ventanas de
Manhattan, de Antonio Muñoz Molina.
-Insectario, de
Jesús Montiel.
-Nostalgia, de
Mircea Cartarescu.
-El secuestro de
Miss Blandish, de James Hadley Chase.
-Moleskine, de
Guillermo Busutil.
-Intemperie, de
Jesús Carrasco.
-Antología American
Splendor 1, de Harvey Pekar.
- ¡Indignaos!,
de Stéphane Hessel.
-Antología American
Splendor 2, de Harvey Pekar.
-En las cimas de la
desesperación, de Emil Cioran.
-El elogio de la
sombra, de Junichiro Tanizaki.
-Antología American
Splendor 3, de Harvey Pekar.
-Héroes, de Ray
Loriga.
-El idiota, de
Fiodor Dostoievski.
-Zama, de
Antonio di Benedetto.
-El silenciero,
de Antonio di Benedetto.
-La soledad del
lector, de David Markson.
-Los suicidas,
de Antonio di Benedetto.
-Antología, de
José Luis Guillén Lanzas.
-Gramáticas de la
creación, de George Steiner.
-Seis propuestas
para el próximo milenio, de Italo Calvino.
-La habitación del
agua, de María Cabrera.
-Retratos (con
flash) de Jaime Gil de Biedma, de Luis Antonio de Villena.
-Un aplauso
americano, de Rafael Indi.
-Tao Te King, de
Lao Tsé.
-Quien mire hacia
abajo, pierde, de Sara Herrera Peralta.
-La familia de
Pascual Duarte, de Camilo José Cela.
-Cuevas Bajas.
Recopilación de datos históricos, de Andrés Márquez Aranda y Diego Ramírez Torres.
-El doble del doble,
de Justo Navarro.
-Nada es crucial,
de Pablo Gutiérrez.
-Mafalda 0, de
Quino.
-Hojas de hierba,
de Walt Whitman.
-Esperando a los
bárbaros, de J.M. Coetzee.
-Tenemos que hablar
de Kevin, de Lionel Shriver.
-Poesía vertical,
de Roberto Juarroz.
-Heridas, de
Jesús Aguado.
-Aforemas, de
Miguel Ángel Arcas.
-Hacia otra luz más
pura, de Miguel d’Ors.
-El jugador, de
Fiodor Dostoievski (relectura).
-El fanal hialino,
de Andrés Trapiello.
-El hombre pájaro
vino a vernos, de Sr. García y Sora Sans.
-Ahora solo bebo té,
de Andrés Catalán.
-Filomeno, a mi
pesar, de Gonzalo Torrente Ballester.
Te has salido!!! Y yo creía que leía mucho.
ResponderEliminarTampoco es para tanto, Inma! De hecho, he leído menos que el año anterior, aunque tampoco es para preocuparse (hay más cosas en la vida aparte de los libros, aunque resulte obvio recordarlo).
ResponderEliminar¡Feliz año nuevo!
¡Feliz año nuevo!
ResponderEliminarSales a una media de casi 5 libros al mes, lo que supone más de uno por semana. Por cierto, veo que has dedicado tiempo a dos autores locales. ¿Lo saben ellos? :) Saludos desde Cástulo.
ResponderEliminarSe ve que las pocas obligaciones dejan mucho tiempo...
ResponderEliminarJosé Luis me consta que lo sabe, ya que le he ido comentando cosas mientras leía sus poemas.
Saludos.